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EDITORIAL: La clave es el amor


NOTA DEL EDITOR: La columna First-Person (De primera mano) es parte de la edición de hoy de BP en Español. Para ver historias adicionales, vaya a http://www.bpnews.net/espanol.

FORT MYERS, Fla. (BP) — Hace muchos años, comenzando mi primer pastorado, recibí una carta muy ofensiva, irrespetuosa y falta y de cualquier cosa que pudiera calificarse de positiva. Me dolió mucho y me hizo sufrir por mucho tiempo.

Esta es la primera vez que comparto públicamente aquella amarga experiencia. La carta era completamente injusta, se basaba en una visión torcida y equivocada de quien la había escrito que no era cristiano y que además había asumido una posición atea y contraria a cualquier cosa que pudiera parecer cristiana.

En una situación similar, con cualquier otra persona que me hubiera enviado una carta parecida, mi reacción, tal vez, hubiera sido muy diferente. En este caso, la carta me la había enviado un familiar a quien quería mucho, haciendo las cosas mucho más difíciles.
Por un tiempo, me limité a guardar la carta dentro de mi Biblia, y comenzar a orar diariamente por aquella persona, hasta que me percaté que tener la carta guardada solo servía como un triste recordatorio de una mala experiencias, por lo que decidí destruir la carta y seguir orando por el autor de esta.

He pasado muchos años sin mencionar el asunto. No me quiero pintar de ejemplo de devoción, y solo saco esta historia a relucir con el propósito, de tal vez ayudar a alguien que pudiera enfrentar una situación parecida. En la actualidad aquella persona dice haber recibido a Cristo como Señor y Salvador, lo cual es una respuesta a mis oraciones. Aquella carta en realidad, solo me hizo redoblar mis oraciones por aquella persona. ¿Por qué pude actuar de esa manera? Porque a pesar de todo lo que esa persona pudiera hacer, yo amo a esa persona.

La clave, aunque difícil de entender es muy simple, es el amor. El apóstol Pedro en 1 Pedro 4:8 dice claramente: “Y, ante todo, tened entre vosotros ferviente amor; porque el amor cubrirá multitud de pecados”. Presta atención, el apóstol Pedro está diciendo que el amor puede cubrir los pecados. No confundamos los términos. Pedro no dice “perdonar” ya que esto solo lo puede hacer Dios cuando el pecador se arrepiente y pide el perdón de Él, tomando en su favor el sacrificio que hizo Cristo en la cruz por nosotros.

La palabra que se usa en algunos originales griegos y que RV traduce como “cubrir” señala a la idea de cubrir algo, de envolver con una piel. En Proverbios 10:12 dice: El odio despierta rencillas; Pero el amor cubrirá todas las faltas. Y aunque en ocasiones es difícil de practicar, el amor en verdad puede cubrir, envolver, hacer que obviemos las faltas de los demás. ¡Pero tiene que existir el amor!

Así que, si lográramos amar a nuestros semejantes, como nos amamos a nosotros mismos, el amor cubriría las ofensas, y haría que viéramos las faltas ajenas de una nueva forma y que de esa manera fuéramos más condescendientes con los demás.

La clave es el amor. Pero cuidado, la explicación cuando usted es atacado no siempre es que la otra persona no sienta suficiente amor por usted. Pudiera ser que esa persona, bajo ciertas circunstancias, cedió a sus impulsos pecaminosos, especialmente si no es cristiana. En este caso, tenemos que amar más para que nuestro amor supla la falta del otro, de manera especial con nuestros familiares no cristianos.

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  • Oscar Fernández